lunes, 25 de octubre de 2010

El domingo pasado cumplí 50 años...

El domingo pasado cumplí años. 50. Diez lustros, cinco décadas, medio siglo… El número me parece irreal lo mire como lo mire. No sé donde los puse, algunos los debo haber perdido…¿Tantos? …Y entonces decidí buscarlos.
En bolsillos, carteras viejas, álbumes de fotos, cajas de archivos, cajones, libros iban apareciendo uno a uno, como si hubieran estado ahí esperando que los descubra, jugando a la escondida. Me encontré conmigo hace muchos días, cuando lucia distinta, cuando tenía bebes y mamaderas, pelo cortito y menos kilos, y mas también. Cuando sonreía desde lugares que me eran extranjeros. Y otros de los que me acordaba como si hubiera estado ayer...¡¿ya pasaron 15 años?!
Encontré afectos que había olvidado que los tenía de no usarlos y también empecé a extrañar los que sí recuerdo pero no están. Me di cuenta de de cuantas cosas se me perdieron cuando me detuve a levantar otras, cuantas veces vacié bolsillos y perdí boletos y cuantas otras veces me llené de objetos inservibles y profané mi esencia pensando que lo hacía por una buena causa. Y sonreí al descubrir fotitos viejas… gente que me resultaba conocida me miraba desde el papel brillante, vestidas con modelos demodé y peinado extraños. Y me llenaba de una alegría suave y tibia mientras enhebraba los recuerdos de cada fiestita de cumpleaños o de cada Navidad con Papás Noeles diversos, gordos, flacos y de barbas diferentes.
Vi de un pantallazo cómo crecieron mis hijos, mis nenes, mis bebes que ahora tienen a su lado mujeres que los aman como a hombres…Y me seguía preguntando ¿Cuándo? Jardincito y sala amarilla, mocos y nebulizador, las tortitas de manteca y el buzo de egresados. Primer grado, primeras letras, muy bien diez felicitado. Jura de la bandera dos veces, dos emociones. Campamentos, micros, se acaba la primaria…¿Qué sigo? Viaje de egresados. Y ya en la facu… Pucha que pasó rápido! ¿Cuando dejé de ir a las reuniones de padres? ¿Cuando dejaron de llamarme por los problemas de conducta?¿Cuando firme el último boletín?
Recordé las casas que fueron mi hogar. En esas en las que viví con papá y mamá. En las que tuve una habitación para “mi sola”. Me senté en el living de mi primer departamento, ese que alquilamos cuando nos casamos y de tan pocos muebles tenia eco. Y después me tomé unos mates en la cocina de “nuestra” primera casita en Morón ¡Qué felices estábamos cuando le armábamos la habitación a nuestro primer hijo! Y las otras mudanzas hasta lograr el sueño de la casa con jardín y pileta que el más chiquito disfrutaba extasiado...Y después la tristeza de estar sola con los chicos en un sueño al que el corazón ya no le latía.
Y mis pasiones, mi trabajo, mis alumnos. Los comienzos a tientas y la vocación a pleno. Las renuncias y las elecciones. Mi escuelita querida donde paso mi vida enseñando y aprendiendo. La gente que se ofrece así, abiertamente a compartir su vida en las aulas a cambio de darle un poquito de lo que yo sé.
Sí, creo que encontré casi todo. Estaba, aunque yo no me daba cuenta. Creí que pesaría mas esa mochila, por eso no podía entender dónde se habían ido. La llegada y la partida de seres queridos. Viajes, alegrías, familia, tristezas, amigos, afectos logrados que endulzan la vida, soledades llenas de otras cosas para distraerlas y que duelan menos.
Una vida feliz, plena. 50 años.

No hay comentarios: